Una de teatro

Ante que nada, he de decir que me cago en mi puto ordenador. Cuando sientes la necesidad de escribir, se cuelga. Me ha pasado antes con las hojas de papel y los lápices, también con los carboncillos para dibujar. La molesta sensación de que necesitas encontrar algo y no aparece por ningún lado, excepto cuando ya no lo necesitas. Suena a topicazo pero díganme señores, ¿acaso no es cierto?

Pues eso, noche de teatro. Noche sin la señorita Merii por un jodido catarro [se te echó de menos; no poder reirnos de los móviles que suenan es aterrador]. Sí tuve la compañía de otra señorita, con la cual he exprimido una tarde y una noche que hacía ya falta. La representación fue "Urtain", escrita por Juan Cavestany y dirigida por Andrés Lima. Una escalofriante reflexión sobre un suicidio llevada a cabo por un elenco de actores que bien mercen llevar ese nombre, ACTORES. La historia de un boxeador de la época de Franco que alcanza la fama y el triunfo, demostrando que todo en esta vida es efímero; que la vida de un ser, el orgullo, la gloria y el dinero vienen como se van. Un día puedes ser el campeón de boxeo de Europa y, al siguiente, caer de una "altura considerable"

Una escenografía que, a decir verdad, consigue mucho con muy poco. Una disposición del espacio que te permite ser el espectador de un ring con doce asaltos. Un vestuario simple que deja paso a la imaginación y unos efectos que, aunque sencillos, encajan perfectamente. Ha sido una obra que ha hecho levantar a un "teatro" al completo. Que más se debe decir, que si tienen ustedes oportunidad vayan a verla porque merece la pena.




Antitético, ¿cierto? ¿Qué cojones hace un chaval de dieciséis años en un teatro, cuando debiera estar de botellona por los parques? ¿Por qué sale a correr mientras sus conocidos fuman porros? Y la pregunta más obvia, ¿por qué hostias escribe en un blog?

Quién sabe, anomalías genéticas, supongo.

Con esto ya me despido: señor Zamora, discúlpeme [me reitero] por no ir al concierto con "usté". Ganas tenía, la verdad, pero no pudo ser. Al próximo me comprometo a ir.

Espero no aburrir con esta reseña, pero me apetecía comentarlo. Merii... faltaste tú y ¡falta que actualices ya de una puñetera vez! (l)

This entry was posted on viernes, 27 de febrero de 2009. You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0. You can leave a response.

2 Responses to “Una de teatro”

  1. Fieles inamovibles, pues =)
    Absolutamente genial lo de anomalías genéticas XDD nos tendrían que revisar los cromosomas a más de uno, creo yo XD

    Un beso!

    ResponderEliminar
  2. Hola José Miguel,

    Te escribo del periódico juvenil INFORMADOS.

    Nos devuelven los correos que te enviamos al mail que nos diste. Por favor, envianos un correo a informados@in-formados.com con tu correo electrónico correcto, por favor.

    Un saludo.
    www.in-formados.com

    ResponderEliminar

Alegrame un rato. Puedes hacerlo escribiendo una chorrada aquí: