con falta de apetito y con kilómetros de vuelta.
Pero lo mejor es cuando acabas y sabes que todavía no has terminado. Sabes que es un descanso, un respiro para besar a mamá y a papá. Una inyección de amor cálido de regazo. Una oportunidad dara dar los buenos días cinco veces más. Un parón para encerar las botas y volver a pasear.
Se ve todo de otra manera cuando el deber está cumplido, el dinero conseguido y los planes se han amarrado bien. Te quedas contento cuando a los planes se les agarra por los huevos.
Próxima parada: Islas Baleares.
Y se acaba cansado,
This entry was posted on viernes, 15 de julio de 2011 and is filed under autosatisfacción post-deber cumplido. You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0. You can leave a response.
La frase "Qué raro Chemi viajando" ya se está convirtiendo en cliché. Vas a tener que contarme qué tal las Islas Baleares, a qué vas?
ResponderEliminarHmm... "Un parón para encerar las botas"... supongo que no serán las mías no? jajaja abrazo enorme Ché, cuidate cabrón.
Las tuyas siguen a buen recaudo, esperando a que nos encontremos de nuevo en el camino, camarada :)
ResponderEliminar